CARLIE Y LA FÁBRICA DE CHOCOLATE
En una casa muy pequeña a las afueras de una ciudad vivía una familia pobre llamados abuelo Joe y la abuela Josephine, el abuelo George y la abuela Georgina, sus hijos, la señora y el señor Backet tienen un hijo llamado Charlie.
La familia como era muy pobre, no se podían permitir muchas cosas. Cada vez en su cumpleaños le regalaban una chocolatina de la fábrica de chocolate Willy Wonka en la que nadie podía entrar, pero el señor Willy Wonka puso en el periódico: "En unas de mis chocolatinas hay 5 billetes dorados que dejarían al que los encuentre entrar en mi fábrica a 5 niñas/os acompañados de un adulto". Al día siguiente era el cumpleaños de Charlie y le regalaron una chocolatina, pero cuando la abrió no estaba el billete dorado . A la semana ya habían encontrado los primeros 4 billetes y faltaba uno.
Cuando Charlie regresaba al colegio fue la la tienda que había cerca de su casa y compró una chocolatina y se encontró el último billete dorado. El último niña/o que no estuviese eliminado se quedaría con la fábrica. Willy Wonka se dió cuenta de que los niños eran muy abariciosos, agoniosos y chivatos y los iba descalificando, pero quedó un niño que fue Charlie porque no era abaricioso y se conformaba con lo que tenía.
Él y su familia se quedaron a vivir en la fábrica de chocolate.
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